Lifestyle

Cinco efectos secundarios de la adicción al móvil

Llámanos exageradas, pero ni tú ni nosotras estábamos tan pendientes del teléfono hace unos años.
fashion smartphone iphone new york ny person human mobile phone cell phone phone electronics finger clothing apparel
Llámanos exageradas, pero ni tú ni nosotras estábamos tan pendientes del teléfono hace unos años. Desde la aparición de los smartphones, nuestra rutina ha cambiado y no en todos los sentidos lo ha hecho para bien. Lo miras constantemente y no, ya nunca se te olvida en casa pero, en el hipotético caso de que no lo llevases en la mano al salir, no dudarías en dar la vuelta para recuperarlo. No miras la hora en el reloj, no escuchas música en tu reproductor ni haces fotos con tu antigua cámara digital. Si a esto le añades los síntomas relacionados con la adicción al móvil que detallamos a continuación, deberías plantearte un plan detox. Las marcas en el cuello Suponemos que no te lo imaginabas, pero sí, tu cuello está sufriendo por culpa del whatsapp. La postura de la cabeza, con la mirada hacia abajo, hace que aparezcan arrugas en la parte delantera y daña los músculos de la parte posterior. Levanta la cabeza. La vista Repasar el timeline de Twitter una y otra vez y hacer lo mismo con el de Instagram puede hacer que acabes viendo borroso y que tus ojos se sequen. Observa la pantalla desde una distancia prudencial e intenta desviar la mirada de vez en cuando. Fobia a no tener móvil. En Estados Unidos ya la han bautizado como nomophobia. Entre sus síntomas está la ansiedad o el malestar físico que causan haberlo perdido o saber que no puede utilizarse. Esto sí que da miedo. El vibrador fantasma. Si vas por la calle tranquilamente y notas tu bolso vibrar pero al mirar nadie te está llamando… lo has adivinado: no estás bien. Quita el modo en vibración y controla las horas a las que miras el teléfono procurando, claro, no chequearlo constantemente. Malestar en el pulgar y en el codo. Sí, hay gente que tiene calambres en el dedo de tanto escribir y personas que, por tener el codo doblado durante demasiado tiempo, sienten una especie de hormigueo o adormecimiento de los dedos anular y meñique.

Entradas recomendadas